agosto 31, 2010

Protégeme

Escarben el hoyo que voy a bajar.
Ahora veo la silla donde te quedabas a esperar, estabas bañado en sudor que los perros seguían.
Quiero el agua que toman las células, quiero el suelo lleno de aletas.
La casa me llama a gritos, dice que los cerdos ya no quieren comer, dice que más tarde te irás a donde no puedan encontrarte y la nuca de los niños quedará helada.
Déjame escuchar la risa de las hienas antes de huir.
Escarben el hoyo que vuelvo a subir.